Me as a Whole.

Me as a Whole.

lunes, 10 de mayo de 2010

Ausencia

La tortura, tan esperanzadora, fúnebre, funesta, agotadora y sádica; con un monto enorme de placeres ocultos, que someten y entristecen cruelmente al que espera, y al que huye. Sentimiento constante, deambulante y corrosivo, que deja al corazón palpitando por ultima ocasión por mas de mil ocasiones durante el día, ente maligno que abusa del frágil sentimiento humano, tan astuto que ataca cuando menos se piensa, tan silencioso que pareciera catacumbas el mundo completo.
Una gota de veneno en un vaso, una estaca al corazón del nosferato, un error de la matemática de la vida... maldita ausencia... maldito llanto... maldita sed de ti... maldito encierro... y a todo esto solo la esperanza... es por eso que esperanzadora la ausencia, siempre con la firmeza en la cabeza, de hacer lo correcto para hacerte volver a mis brazos, observando la insipiente realidad de tu distancia, respirando en el aire tu aroma haciendo que mi cabeza se torture con la idea de que sigues aquí a mi lado, tocando con mis manos los recuerdos que has dejado, viendo como las palabras de una caja de regalo se vuelven deshonestas, forcejando entre la razón y las lagrimas que escurren cada rato que no te encuentro, sometido al delirio entrañable que ha dejado la cínica huida de tu cuerpo, y la estancia tan agradable de tu alma y de tu espíritu indomable... vaya paradoja, tu cuerpo lejos tu alma cerca, y cuanto mas importante se vuelve el alma, mas se extraña el cuerpo poseedor, y yo te extraño tanto, suplicante de que vuelvas, que ahora mi pretexto es escribir para deleitar a mi demencia, para deleitar a mi conciencia, para no aburrirme, para extrañarte pero no tanto como ahora, para que tu recuerdo no me dañe, para que tus fotos tengan sentido, para que mi alama descanse y mi cuerpo deje de estar fatigado.

MALDITA AUSENCIA... BENDITA SEAS SI ES PARA LA FELICIDAD DE MI AMADA.